Cuando pensamos en algún proyecto de negocio, lo imaginamos y calculamos casi siempre perfecto, sobre todo porque nace con la ilusión de que sea un éxito. Podemos hacer números en una hoja de cálculo, estimar las ventas y los gastos para saber lo que podríamos ganar. Sin embargo, aquello no es tan sencillo como parece. Lamentablemente el conocimiento o la idea no nos llevarán a cumplir con los objetivos económicos que nos planteamos en un inicio. Los números son fríos y sirven de guía. El problema inicia cuando descubrimos la aceptación del mercado e incorporamos el factor humano en nuestra ecuación.

Es probable que la curiosidad por leer un libro como éste sea porque ya has pensado en algún negocio a emprender. Sin embargo, para llegar al modelo de arranque es sano considerar diferentes giros para tu empresa o diferentes formatos de negocio.

Iniciar con una idea general de lo que deseas es un gran avance. Recuerda que, hasta las ideas que parezcan absurdas pueden ser de lo más innovadoras. Platica con diferentes personas que consideres objetivas con la finalidad de compartir lo que quieres iniciar, formas de llevarlo a cabo, características del producto o servicio, esquemas de ventas, etcétera. No es lo mismo tener una idea en la cabeza a que otros te compartan sus opiniones sobre lo que deseas. De seguro encontrarás excelentes puntos de vista y consejos que ni siquiera consideraste en un principio.

En la búsqueda de personas que pudieran opinar sobre tus nuevos proyectos, es importante que conozcan del tema que les platiques y que ellos sean individuos que consideres exitosos en esa especialidad. Escuchar a personas que no dominen esos temas sería de poca ayuda, debido a que mucha gente suele opinar sin fundamentos.

Cuando observamos a empresas o corporativos solemos pensar que, para poner en marcha la idea, contaban con los mejores estrategas de negocios, que realizaron un costoso trabajo sobre el mercado y que iniciaron con inmensas cantidades de dinero. ¿Pero, qué tan cierto es esto? Es muy probable que, al investigar, te encuentres con grandes sorpresas, que muchos de esos admirables corporativos iniciaron con una austeridad absoluta. Comprenderás el alto valor de las ideas a la hora de emprender y desarrollar un negocio.

Para complementar este y otros temas de negocios, te recomiendo que leas mi libro “HOY EMPLEADO MAÑANA EMPRESARIO”.